Para el golf es clave el "Self Confidence", o la confianza en uno mismo

Hace pocos días, después de mi mediocre participación en Preseniors en los Abiertos de Viña del Mar y de Las Brisas de Santo Domingo, escribí un artículo de cómo iba a recuperar la confianza perdida.

Hablé, en la parte final del artículo, de que iba a hacer unos ejercicios, fuera de la cancha, para fortalecer la mente.

En efecto, cada vez estoy más convencido de que estos ejercicios son fundamentales para el golfista que compite a un nivel medio y alto, y para todo jugador que toma muy en serio su golf.

Como he dicho otras veces, es el equivalente a ir al gym para fortalecer el cuerpo. Pero hay algo mas.

El golf, por su complejidad y competitividad, habitualmente, nos pega muy duro.

En inglés, el término "golf will beat us up", es sumamente gráfico. Es muy poco frequente que juguemos un gran golf. La mayoría de las veces no vamos a jugar tan bien como queremos.

Esto significa que la mente, en el golf, tiende a debilitarse bastante mas que el estado físico.

Por lo tanto, es necesario tener claro que, si bien el trabajo en gym es muy, muy importante para el golf, el trabajo que uno haga para fortalecer la mente, es doblemente importante.

Ahora, la buena noticia es que fortalecer la mente no es demasiado complejo, y que la mayoría de las técnicas para lograrlo son relativamente simples, y no requerimos un profesor para hacerlas.

Esto es así, porque la poderosa mente inconsciente (subconsciente, automática o intuitiva), es como un grabador de sonidos (tape recorder). Graba todo lo que escucha, sin ningúna excepción, y sin emitir ningún juicio de valor sobre lo que está captando. Tal como lo hace muy bien la grabadora, la mente inconsciente graba lo último que "recibe" de un tema,  encima de lo anterior, el que queda borrado.

El fundamento de ejercicios como las afirmaciones, las visualizaciones o el auto hipnotismo, es que si uno repite un número suficiente de veces el "mensaje", este  quedará grabado en la mente inconsciente, la que, al no poseer facultades críticas propias, y ser incapaz de distinguir la realidad de lo imaginario, lo aceptará como verdadero.

Esto constituye una herramienta inmensa para la confianza del golfista, confianza que tiende a ser golpeada, o "beaten up", con muchísima frequencia.