Steve Stricker: El valor del juego corto ( y el putter)

Acabo de ver por TV como el excelente Steve Stricker ganó el Memorial Tournament de la PGA TOUR.

Stricker lideró el Torneo desde el primer día, y faltando cuatro hoyos, estaba ganando por tres golpes. Ahora bien, todos sabemos que una de las cosas más difíciles en el golf, es cerrar un torneo cuando tenemos una ventaja que se nos puede ir de las manos.

Para enfrentar, y superar esta presión, una de las herramientas más potentes es tener un gran juego corto y un gran putter, para compensar el natural deterioro del juego largo cuando tratamos, en demasía, de no cometer errores.

Esto es lo que hizo Stricker después de quedar injugable con el drive en el 15. Su buen bogie en este hoyo lo dejó con sólo dos palos de ventaja, por delante de los peligrosos Kuchar y Jobe, faltando tres hoyos muy difíciles.

En el par 3, hoyo 16, Stricker la puso en el bunker pasado del green y debió jugar "a buenas" por el lado izquierdo del hoyo para no arriesgar ir al agua. Quedó a unos seis metros, y embocó un gran putt para salvar el par, y mantener dos golpes de ventaja.

En el hoyo 17, un par cuatro, pegó un buen drive, pero luego tiró un muy mal fierro al bunker de la derecha del green. Nuevamente hizo una buena sacada de bunker, para embocar otro gran putt de dos metros.

Esto le permitió a Stricker jugar el hoyo final con la tranquilidad de tener dos golpes de ventaja, y aseguró su triunfo con un bogie, jugando el hoyo de forma muy conservadora. Creo que no es una casualidad de que Steve Stricker gane siempre cuando entra al día final con ventaja. Sin duda, es por que es uno de los mejores golfistas del mundo (ahora es el número cuatro del ranking mundial), debido a su excelente juego corto (150 yardas hacia adentro) y ser un excelente jugador de green. También se destaca por una gran capacidad de planificar sus tiros en forma rigurosa y conservadora.

La lección para todos nosotros, en mi opinión, es clara.

Steve Stricker practicando putter

Debemos practicar el juego corto y el putt dos veces más, al menos, que nuestro juego largo. Ya que, bajo una intensa presión, es de las herramientas que más nos va a "salvar", y permitirnos seguir jugando con la confianza necesaria para ganar.

Esto es esencial para los que creemos en el Golf Mental. Lo que pasa es que si nos encontramos en una situación de intensa presión, y si nuestro juego corto nos funciona bien, la probabilidad de "quedarnos" en nuestra mente "intuitiva", o "inconsciente", aumenta significativamente, y también nuestra chance de mantener nuestro buen golf.