Encontré super difícil los greens hoy en la segunda ronda del Campeonato Nacional de Aficionados.(ver resultadosT).
Sin duda que dos cosas me pasaron la cuenta en un lindo y asoleado día en Chicureo.
La primera fue que no pude jugar bien sobre el green: Tiré siete veces de cerca para birdie y no emboqué ninguno. A veces sencillamente no quiere, y hay que olvidar rápido. Al final hice 82 palos con 39 putts lo que es demasiado. Nuevamente fueron cuatro greens de tres putts.
Pero lo que fue un desastre fue lo que pasó en el hoyo tres. Había partido muy bien y muy metido en mi Método Mental, haciendo dos buenos pares en los dos primeros hoyos. El hoyo tres es un par cinco que para hoy, se alargó en unas cincuenta yardas. Pegué un mal drive hacia la izquierda pero quedé con tiro. Mi segundo tiro fue malo y mi fierro cinco cruzó hacia el lado derecho al rough y quedé semi injugable en una mata llamada Flor de la Pluma. Debí haber tomado un injugable, con un golpe de penalidad, y pude haber hecho un bogie 6, sin mayor problema.
Pero aquí es donde me falló uno de mis pilares más importantes. Pensé que podía sacarla para el medio y avanzar la pelota unas 30 yardas más cerca del green, e intenté un tiro que tenía menos de 50% de chance de resultar. Craso error. Pegué mal, tuve mala suerte y quedé injugable nuevamente. Me costó un triple bogie ocho.
Por esto que cuento, es TAN IMPORTANTE en el golf, planificar rigurosa y conservadoramente cada tiro.
Lo que pasó en los siguientes dos hoyos es tambíén típico. Estaba molesto conmigo mismo. Me salí del Método, e hice inmediatamente tres putts en el par 3, hoyo cuatro, y otro bogie en el hoyo cinco.
Volví a concentrarme bien en el seis, y siete, con sólidos pares, y tuve buena chance de birdies.
Dos malos drives en el ocho y en el nueve sentenciaron dos bogies y un muy mediocre 43 para estos primeros nueve hoyos.
En la segunda vuelta apliqué muy bien mis técnicas y jugué la cancha en forma casi perfecta. Hice 39 palos debido a tres greens de tres putts, debido más bien a la mala fortuna, que a malos golpes.
Bueno, y así es el golf. Lo que no es controlable es que a veces no vamos a estar finos para el putter. Nada que hacer, y lo más probable que no sea nada técnico, y que al día siguiente todo cambiará para mejor, pero lo que sí es controlable, es la planificación de los tiros........imperdonable lo que intenté en el hoyo tres, y bien merecido el tripe bogie ocho.
Sin embargo, estas cosas pasan con la adrenalina del juego y hay que olvidar rápido.
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La buena noticia es que sigo segundo en mi categoría (Preseniors). Estoy a cuatro palos de Matías López y me quedan los 18 hoyos finales, mañana, para intentar alcanzarlo.
1 comentario:
Terence
Estoy seguro que mañana jugarás como los Dioses!! Tienes esa tremenda capacidad de rebotar y saltar adelante
Vamos que tu puedes!!
Elias
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